lunes, 8 de diciembre de 2014

Un Año del Blog

El tiempo pasa, aunque a veces no nos demos cuenta, aunque a veces no queramos.
 
Parece mas que un año desde ese día que comencé a escribir este blog para sanar mis heridas, para avanzar en mi duelo, para ayudar, para escuchar, para no pensar en el miedo.
 
Me hace feliz mirar hacia atrás y recordar las historias compartidas, las hermosas personas que conocí.
 
Cuando investigaba cómo hacer un blog, recuerdo que leí por ahí que normalmente los blogs no sobreviven al año. En un año cambian muchas de las circunstancias de por qué lo hacemos, por qué escribimos. Además, lleva mucho tiempo escribir, buscar información, fotos, y hasta promocionar el blog para llegar y ayudar a mas personas.
 
Hoy mis miedos son diferentes, no están tan latentes. Tengo a dos arcoíris conmigo y dos angelitos en el cielo. La rutina diaria y las urgencias muchas veces me impiden dedicarle tiempo a este blog. Pero aún no es el momento de decir adiós. Es el momento de decir GRACIAS. Gracias a todos los que leen. Gracias a todos los que comparten sus historias. Gracias a todos los que dejan sus comentarios. Gracias a todos los que me apoyan para hacerlo.
 
A TODOS, GRACIAS.
 
 
 

viernes, 14 de noviembre de 2014

Salir al mundo

Mi hijo no puedo salir al mundo. Se quedó en mi panza dormido. Y fue directamente al cielo, al convertirse en un ángel hermoso.
 
Luego de su muerte sentía vergüenza y hasta miedo hablar sobre él, sobre lo que vivimos y sobre todo.. sobre su muerte. Creo que influía mucho ver la cara de las personas... como incómodas. Me sentía como que estaba contando algo vergonzoso. O hasta sentía que había hecho algo malo aunque sabía que no había sido así.
Y en el fondo eso me hacia sentir mal, porque mi hijo no era para nada un tema de vergüenza.. solo que se había muerto antes de nacer.
 
Sentía ganas de gritarle al mundo que mi hijo había muerto. Sentía ganas de contar mi historia, y la de él. Sentía ganas de que todos se enteren por qué tenía el corazón roto y me costaba respirar. Tenía ganas de escribir en los foros.. pero sentía una especie de vergüenza... no se de donde venía, pero ahí estaba. Contarlo pero sin que se me identifique... como si fuese algo extraño. Ese es el tabú que está arraigado.
Me pasó lo mismo cuando comencé a escribir en este blog, lo hacía de manera anónima.. por el "qué dirán".
 
Hasta que un día me levante y me dí cuenta. Mi hijo vive en mi memoria y en mis células (como en el escrito "Sentirse Madre"). Nunca negaré su existencia. Hablar de él, me hace mejor persona. Aceptar su existencia y muerte me hace madre.
A veces veo a madres que quieren contar su historia y la de sus bebés.. pero lejos. Y se que es todo un proceso: de aceptación, de maduración, de fortaleza.
 
Mi hijo no pudo salir a este mundo vivo, así que salí yo por él :)

 

domingo, 19 de octubre de 2014

Somos Madres: el día de la Madre

Aquí ha llegado el día. Ese otro día que nos da miedo. Miedo por sentir dolor, por sufrir. Bronca porque no está. Impotencia. Llanto.
Sentimos que diablo mismo inventó el día de la madre.
 
Amig@s, es mi cuarto día de la madre sin mi hijo. Y no les voy a mentir, el primero es el mas duro. Luego nos vamos acostumbrando, como a todo. Pero hoy pienso en esos padres que estarán solos, solos por primera o segunda vez. Y por mas que estén acompañados, se sienten solos. Porque, en este día, solo piensan en un persona: su bebé.
 
Hay veces que queremos que nos saluden, porque nos sentimos madres, los llevamos en nuestras pancitas y los ayudamos a crecer. Algunas tuvimos la suerte de traerlos a este mundo, dormidos, pero los trajimos. Otras tuvieron la suerte de verlos respirar.. aunque sea unos minutos. Pero todas sentimos lo mismo.. ese amor de madre. Ese sentir que dice una amiga "te amé desde el momento que supe que estabas dentro mío". Somos madres.
A esas madres en especial hoy quiero saludarlas y reconocerlas por su fuerza. Somos madres, aunque no llegamos a criarlos y verlos crecer en la vida. Somos madres, aunque nuestros hijos nos hayan dejamos demasiado temprano.
 
Nuestros hijos nunca serán olvidados porque siempre los llevaremos en nuestros corazones. Somos madres.
 
Hoy tal vez necesitemos un abrazo, un saludo, un llamado, un mensaje de texto, una frase enviada por mail o compartida en el muro de Facebook, un ramo de flores, un perfume, una sonrisa "todo estará bien".
Hoy tal vez necesitemos alejarnos, llorar, que no nos saluden, ignorar el día, que nos acompañen a hacer algo totalmente a lo esperado este día.
 
Cada una de nosotras es diferente. Nuestros duelos son diferentes.
 
Yo no estaba lo suficientemente fuerte como para recibir un saludo. Mi primer día de la madre preferí que me ignoren, preferí pasar desapercibida. Demasiadas emociones y era lo que sentía que podía hacer, porque no hay recetas.
 
Hacé lo que sientas que te va a hacer bien. Y compartí tu deseo con aquellos que te quieren. Ellos no saben qué te hará bien o que querés, pero solo tenés que decírselo.
 
¿Qué te haría sentir bien?

martes, 7 de octubre de 2014

Cuando Dios no es la respuesta

Mirando hoy hacia atrás puedo ver que tal vez nunca fui muy creyente ni practicante de la iglesia católica. Fui bautizada de bebé y tomé la comunión a los ocho años. Me casé bajo los mandatos de la iglesia católica. Y le realicé a mi primer bebé un servicio y lo llevamos al cementerio. Pero en el fondo se que creo en Dios porque así me lo enseñaron, no porque yo crea. Me cuesta creer en él ciegamente. ¿Y si todo es una creación para poder controlar a las personas para que vivan en comunidad? Si existe Dios, ¿por qué deja que sufran muchas personas hambre, enfermedades dolorosas, abusos y todo tipo de atrocidades? Alguien me dijo que él hasta entregó a su único hijo y que éste también sufrió. ¿Cómo puedo aceptar que él deja que suframos porque "sabe porqué hace mas cosas" o "que luego nos compensará"? Me cuesta creer.
No me malinterpreten... me parece bárbaro aquellos que creen... solo que a mi me cuesta. Me parece injusto (y él se supone que es una persona justa).
Encima vivo con una sensación que estoy haciendo algo malo o pecando porque pienso esto. Pero así me siento.
Por mas que recé Dios no me escuchó. Por mas que recé, Dios no me trajo paz. Por mas que recé Dios me dejó sola todo el año.
Podrán decir que me recompenzó porque tuve otra hija. Pero entonces solo las obras buenas son obra de Dios? Hubiese preferido no pasar por tanto dolor y tener mi primer hijo vivo que se muriera y tener otra hija.... no me gusta pensar que ella es una compensación.
También dicen que Dios sabe lo que que hace.. o porque lo hace... pero para mi no fue LA RESPUESTA. No encontré en él contención. No encontré en él ninguna respuesta. No encontré en él esperanza. No encontré nada de lo que dicen que es cuando lo necesitamos.
Siento que lo único que hice fue culparlo. Necesitaba, y necesito, que alguien sea responsable por su muerte. No me gusta la idea de que las cosas "simplemente pasan".
 
Tal vez, mi fe no es suficiente. Tal vez, no soy tan creyente.
 

                                                                                                 

viernes, 22 de agosto de 2014

Te tengo un Secreto

Te tengo un secreto.
Uno del que nadie habla. Los bebés mueren, tus sueños quedan destrozados y algunas veces los corazones no sanan sin cicatrices visibles. Trata de arreglar el tuyo de todos modos.
Te tengo un secreto…
La gente no entiende. Algunos tratarán, otros mirarán hacia otro lado mientras otros te agredirán por contar la historia de la muerte de tu hijo. Compártela de todos modos.
Te tengo un secreto…
Yo tengo un hijo. Puede que no lo veas, pero es real y también lo es mi título de mamá. Y estoy orgullosa de mi rol como madre!
Te tengo un secreto…
Aunque este sonriendo, me muero por dentro. Puede que no hable de cómo sucedió porque cuando mi hijo murió una parte de mi también lo hizo, pero hablar y compartir es la única forma que conozco para calmar el dolor. Necesito que puedas hacerme un lugar para lo incómodo, para lo real y las verdaderas emociones de depresión, desesperación, dolor y pena de mi experiencia. No se supone que de eso trata ser amigos y humanos de todos modos?
Te tengo un secreto…
Estoy enojada de que mi hijo murió. Por qué yo? por qué mi hijo? Me pregunto a mí misma, a Dios, sin ninguna respuesta. Por qué nos tuvo que pasar esto?
Te tengo un secreto…
Estoy celosa de que tengas a tu hijo y yo no tenga al mío. Si, lo dije. Qué vas a hacer con mi envidia de todos modos…?
Te tengo un secreto….
Siento que es mi culpa que mi bebé muriera. Siento que tendría que haber sabido más. Pero no voy a aceptar esa culpa, voy a buscar la forma de perdonarme.
Te tengo un secreto…
La gente va a evitar escuchar tu dolor, incluso si no tratas de esconderlo. Aquellos que no conocen tu dolor se asustarán de la forma con la que expresas tu pena. Habla sobre eso de todos modos.
Te tengo un secreto.
Mi bebé murió. Y ya no quiero sentir que tengo que esconderlo.
De todos modos… ya no es un secreto.
Traducción de texto de Revista Still Standing. Link al artículo original: http://stillstandingmag.com/2014/04/ive-got-secret/

martes, 29 de julio de 2014

Lo único de lo que me arrepiento

A medida que fueron pasando las horas después de que nos confirmaran que nuestro primer hijo estaba muerto, tuvimos que tomar muchas decisiones. Casi sin saber si era lo que realmente queríamos. Pero tampoco teníamos la cabeza como para pensarlo. ¿Pensar que? Si parecía todo irreal.
Lo primero que tuvimos que decidir fue como nacería. Lo bueno de la cesárea es que sería rápido pero lo malo sería verme todos los días con una cicatriz en mi cuerpo que me recordara la cicatriz en mi corazón. En cambio, el parto natural iba ser muy duro parirlo pero la recuperación física sería mas rápida y además podríamos intentar buscar otro hijo mas pronto.
Me preguntaron si quería verlo, pero decidí que no y no me arrepiento. Cuando nació y vinieron los de neonatología para llevárselo nos preguntaron si queríamos bautizarlo y les pregunté si podía hacerse ya que no tenía nombre. Por suerte dijeron que no había problema, así que preferimos que lo bautizaran.

Image courtesy of m_bartosch / FreeDigitalPhotos.net
 
De lo único que me arrepiento es de no haberle llevado una ropita. Si lo hubiese pensado habría encontrado la manera de llevar alguno de esos hermosos y tiernos conjuntitos que compre pensando en él.. en que él lo usaría. Me arrepiento de no haberle pedido a la funeraria que le pusiera uno de esos conjuntitos.
Me lo imagino desnudito... frio... tal vez porque el otro día escribí sobre su cajoncito al ladito mío. Y recuerdo esa sensación y esos sentimientos como si fuesen hoy.
Trato de pensar que la clínica, luego de la autopsia, tal vez le puso una batita (esa que le ponen a todos los recién nacidos ahí) para entregarlo a la gente de la funeraria cuando fue a retirarlo.
 
Tal vez porque ahora hace frio, y esos días de enero hacia calor.

Tal vez no me di cuenta porque así tenía que irse.. como llegó... solo con amor y nada material.
 
Tal vez en el fondo sabía que la ropita de nada lo podría proteger.. ya le había pasado lo peor.. no poder conocer a mamá y a papá en esta vida.

domingo, 20 de julio de 2014

Hoy Recomiendo: Resistiré

Esta es una de esas canciones que escuché mil veces... mil doscientas veces. Pero anoche la escuché y esta vez tuvo otro significado....

RESISTIRE

Cuando pierda todas las partidas
Cuando duerma con la soledad
Cuando se me cierren las salidas
Y la noche no me deje en paz

Cuando sienta miedo del silencio
Cuando cueste mantenerse en pie
Cuando se revelen los recuerdos
Y me pongan contra la pared

Resistiré erguido frente a todo
Me volveré de hierro para endurecer la piel
Y aunque los vientos de la vida soplen fuerte
Soy como el junco que se dobla pero siempre
Sigue en pie

Resistiré
para seguir viviendo
Soportare los golpes
Y jamás me rendiré
Y aunque los sueños
se me rompan en pedazos
Resistiré
Resistireeeé!

Cuando el mundo pierda toda magia
Cuando mi enemigo sea yo
Cuando me apuñale la nostalgia
Y no reconozca ni mi voz

Cuando me amenace la locura
Cuando mi moneda salga cruz
Cuando el diablo pase la factura
O sí alguna vez me faltas tú

Resistiré erguido frente a todo
Me volveré de hierro para endurecer la piel
Y aunque los vientos de la vida soplen fuerte
Soy como el junco que se dobla pero siempre
Sigue en pie

Resistiré
para seguir viviendo
Soportare los golpes
Y jamás me rendiré
Y aunque los sueños
se me rompan en pedazos
Resistiré
Resistireeeeeé!


¿Con qué parte te sentís identificad@?

viernes, 11 de julio de 2014

El Lugar del Padre

Me pasan cosas como ésta, 
aunque no tenga importancia
andar contándoles a todos 
todas las cosas que pasan. 
(Facundo Cabral)

Siempre quise escribir algo de lo que me había pasado pero me resistía mucho a escribir esto. Primero fue falta de tiempo, después no encontrar el momento adecuado. Creo que en el fondo era no querer escribir para no tener que llorar.

Hace ya más de cuatro años que nuestro hijo no nació. En la normalidad de cada día es algo que no me afecta. Tenemos 2 hijas hermosas que no paran de alegrarnos la vida y, como muchos, trabajo, leo, veo la tele, como… Pero cada tanto algo pasa y me hace parar, a veces es un segundo y a veces es más tiempo. Y me acuerdo. Y como Funes, aquél personaje de Borges que no podía olvidar ningún detalle, siento que recuerdo cada segundo vivido desde que el obstetra no encontró los latidos del bebé hasta que terminó el parto. De ahí en adelante sólo recuerdo algunas sensaciones, situaciones, impresiones y el dolor que me acompañaba todo el tiempo. 
La verdad es que habría muchas cosas para contar sobre ese momento, sobre el año que siguió, sobre las cosas que tuvimos que hacer, sobre todo el dolor y la tristeza que tuve. Pero en este momento prefiero escribir sobre el lugar del padre o, mejor dicho, el lugar de quien sería el padre si ese hijo hubiera nacido.
Lo primero que me viene a la memoria cuando pienso en esto son los papeles del día después. Como siempre, en esta sociedad nadie está tranquilo si previamente no llenamos mil papeles diferentes con mil veces los mismos datos y ésta no fue la excepción, tuve que escribir muchas veces mi nombre y muchas veces que relación me unía con el difunto (o vaya a saber como lo llamaban). No sabía si poner “padre” o  “papá”, la realidad es que nunca lo había pensado y es que, en ese momento, nada tenía sentido, yo no era el “padre” ni el “papá” de nadie, estaba ahí solo para que la cochería pudiera retirar un cuerpo sin vida de la clínica.
Una vez que salimos comenzó la parte difícil. Volver a las rutinas que pensábamos iban a cambiar con la llegada de nuestro hijo. Pero las rutinas seguían ahí, iguales, inmutables, recordándonos lo que tendría que haber sido y no fue. Y creo que es en ese momento dónde más me afectó mi rol de “pareja de”. Al menos en mi experiencia, pareciera ser que para el común de la gente el embarazo es de la madre, el padre es como un simple espectador que circunstancialmente se encuentra al lado de la embarazada sólo para aceptar sus cambios hormonales y cumplir con sus antojos. En el caso de la pérdida del embarazo pasa algo similar. Todo el mundo se preocupa por la madre y el padre es como un ser inmutable que no se ve afectado en lo más mínimo por los acontecimientos. Así me pasaba horas explicando a los demás que estábamos tristes, que a pesar de no haber visto al bebé se hacía muy difícil seguir adelante, que no le habíamos puesto nombre porque no queríamos saber el sexo hasta que naciera y así con un montón de otros asuntos. Muchas veces venía gente que me decía “che, decime como anda tu mujer? no le quiero preguntar a ella porque viste…. que se yo… ” y la verdad es que muchas veces estuve a punto de decir “y por qué no le vas a preguntar a ella como estoy yo? porque viste… que se yo…. a mi también me duele, el hijo de ella era también mi hijo y si bien yo no era el embarazado por dentro estoy sufriendo como un condenado a un
dolor eterno… por lo tanto la verdad es que... viste… que se yo... no me preguntes más, ni por ella, ni por mi!”. La verdad que nunca contesté eso y no me arrepiento, creo que la gente no sabe que hacer en estos casos y para muchos es difícil soportar el silencio, creo que muchos están convencidos que “algo” deben preguntar, que quedarse callados es peor, que decir “ustedes son jóvenes ya van a tener otro” aminora el dolor y no se dan cuenta que lo único que están haciendo es tratar de llenar un vacío que les queda muy grande. Después de haber pasado algunas veces por esta situación aprendí a convivir con ella, si la pregunta era sincera la respuesta también lo era (o al menos lo mas sincera que yo pudiera soportar en ese momento), si la pregunta era de compromiso la respuesta no era más que algunas frivolidades camufladas.
 
Creo que si alguien me preguntara qué aprendí de este momento podría responder un montón de cosas pero éstas son unas de las más importantes: el padre existe más allá de la madre, el padre sufre, al padre le duele haber perdido el embarazo, las comparaciones no tienen sentido (no tiene sentido decir “entiendo que te duela, pero por lo que pasó tu mujer...” ni “peor hubiera sido que naciera vivo y después muriera...”) y, por sobre todas las cosas, que no es malo sentirse triste y aceptarlo.

Quizás más adelante vuelva a escribir algo aunque, como me acaba de pasar, esté llorando desde el principio hasta el final.

Mariano

domingo, 29 de junio de 2014

Porqué mi primer bebé no tiene nombre

 
La inocencia del primer embarazo. Las esperanzas intactas. Respirando día a día el maravilloso momento que estaba por llegar. Ese momento que todo el mundo habla desde que somos chicas: el mejor momento de tu vida.
A penas quedé embarazada la primera vez tenía mucho miedo. Esos miedos de primeriza. En la semana 6 tuve un pequeño sangrado.. marrón por suerte, que luego descubrimos que era el de implantación. No podía conseguir turno con mi médico de toda la vida y andaba con miedo porque me dolía del lado izquierdo. Cuando finalmente tuve turno, me dijo "¿no te dio los papeles mi secretaria?" Yo le pregunté "¿Qué papeles?" hablando dos segundos mas con él me confirmó que no era el medico que yo necesitaba. Asi que me lleve los papeles y me hice los análisis pero nunca mas volví. Y en el medio me enteré que tenía infección urinaria asintomática... lloré un montón.. creí que era lo peor que me podía pasar. Luego vimos varios obstetras antes de elegir el definitivo (ni tenia idea que iba a ser una decisión clave).
Ilusión. La ilusión de enterarnos qué era en el mismo momento. La ilusión que el obstetra dijera cuando naciera "¡es un varón!" o "¡es una nena!". No importaba si era varón o nena, queríamos a nuestro hij@ y poníamos el acento en su salud ("lo importante es que venga sanito").
En la semana 20 hicimos el scan fetal y la doctora nos preguntó y aceptó nuestra decisión de no querer saberlo. Estaba todo perfecto. Y dijo que era muy evidente qué sexo tenía asi que no iba a mostrar mucho para no nos dábamos cuenta. Ahí empecé a preguntarme ¿se notaba que era varón o que era nena?
Compré alguna ropita color crema, amarillita y blanca. Después del sexto mes, un día fuimos con mi marido a Cheeky y pedimos un conjuntito lindo para salir de la clínica. La vendedora nos preguntó qué era y le dijimos que no habíamos querido saberlo y nos dijo "Ah, si no saben no tengo nada. Lo de algodón blanco está ahí".
La sociedad no está preparada para no saber el sexo de un bebé. Rompés lo establecido y te miran como que estás loca. Pero nosotros seguíamos con la misma idea.
 
Cuando nuestro obstetra nos dijo que tenía que nacer ya que estaba sin vida... obviamente no era lo que habíamos soñado. Pero yo quería al menos mantener esa imagen del bebé hermoso que imaginaba al cerrar los ojos, al ver las ecografías. Encima el medico nos dijo que nuestro bebé había muerto un par de días atrás y seguramente estaría macerado. Mas me aferré a esa imagen en mi cabeza.. del hermoso bebé que había imaginado. Y pedí no verlo. Sería una imagen muy fuerte y que me acompañaría el resto de mi vida impregnada en mi retina... además del dolor en mi corazón.
 
Cuando la empresa funeraria nos entregó el certificado de defunción, les comenté que no habíamos querido saber su sexo.. ni importaba era igualmente nuestro hijo. Y ellos doblaron el papel para que no lo viera.
 
Tiempo después mi mamá me comentó que el cura en el cementerio le preguntó el nombre del bebé y ella dijo "no tiene". El cura no entendía cómo era que no tuviera nombre. Y yo me pregunto ¿acaso Dios necesita saber nuestro nombre para amarnos y recibirnos?
 
Parecíamos locos, queriendo mantener una decisión que habíamos tomado durante un escenario de felicidad plena, aferrados a ella... parecía que era lo único que nos quedaba de ese momento y no queríamos que cambiara.
 
Eventualmente el destino me llevo a enterarme sin querer. Seguramente era el momento. Fue sin querer, ya que estaba fotocopiando su partida de defunción y completando papeles debido a su muerte. Sin querer, lo vi. Estaba lista. Era el momento de saberlo. Lo vi. Pero ya no tenia sentido ponerle nombre. Siempre sería y será MI PRIMER BEBE.



viernes, 20 de junio de 2014

¿Es tu primer embarazo?

El otro día les contaba qué me pasa cuando me preguntan cuántos hijos tengo. Y recordé también esta pregunta que me hacían cuando tenía panza "¿Es tu primer embarazo?" Y obviamente esta pregunta también me genera mucha lucha interna.. la misma que les conté en "Y me preguntan cuántos hijos tengo".
 
Pero ahora quiero hablarles sobre los números, no sobre la lucha. No es lo mismo tener uno o dos partos. No es lo mismo tener una o dos cesáreas. Fijense que no.
 
  
Si mi primer bebé no hubiese salido al mundo por parto natural sino por cesárea, hoy en día no podría tener mas hijos (si yo y mi pareja decidiéramos tenerlos) ya que no se recomienda tener mas de tres cesáreas... cicatrización o otros detalles médicos que exactamente no conozco.
No es lo mismo entrar en la sala de parto sin saber qué hacer, a entrar sabiendo qué tenemos que hacer ahí y que hacen los demás.
Y ese comentario de la partera cuando estaba embarazada de Ana... que se iba a desencadenar todo mas rápido porque iba a ser mi tercer parto!!!
No es lo mismo hacerte 4 tests de embarazo, que uno solo. Ni tampoco celebrar con la familia dos anuncios de embarazo... que 3 o 4. No es lo mismo tener dividido nuestro corazón en cuatro, tres, dos o un hijo.
Cuando no viene nuestro período y vamos al médico, ya sabemos de memoria qué análisis debemos hacer, cuántas ecografías, etc.

Pienso en mi después de que mi primer bebé se convirtió en ángel, compartiendo alguna charla con una amiga o compañera de trabajo embarazada. Yo sabía que eran las nauseas y cómo se sentían las pataditas. Hasta sabía cuales eran las pautas de alarma, o qué debía comer o evitar hacer... pero no tenía un hijo en casa. Y cuando volví a quedar embarazada, había gente que quería darme consejos.. pensando que por no tener hijos conmigo era primeriza...
 
Pero creo que la gente cuando pregunta "¿es tu primer embarazo?" es una pregunta casi obligada.. como el comentario que hacemos en el ascensor sobre el clima "hace frío hoy". Como no sabemos qué decir, decimos estas frases. Sin pensarlo. Creemos que debemos decir algo.

¿Vos qué respondiste?

viernes, 13 de junio de 2014

Mi primer mundial sin mi bebé

Una de las cosas que mas duele.. esas que sentís cuando vas mejorando pero te clavan un puñal, son las fechas: aniversarios, cumpleaños, navidad y fin de año, día del padre/madre... hasta el mundial.
Con el embarazo proyectamos un futuro con nuestro hijo.. pensamos cómo serán las cosas y qué haremos: con su ropa, su cuarto, quién lo cuidará cuando regresemos al trabajo, y hasta qué haremos con ese bebé en esas fechas.
La primera fecha que me tocó vivir a mi fue el mundial. Al estar embarazada de 7 meses ya había conversado mi licencia maternal del trabajo y por ende pensaba "Uyy el mundial lo voy a ver en casa!". Es emocionante compartir el mundial en el trabajo porque se arman reuniones colectivas en el comedor o en las salas de reuniones y se comparte mucho el espíritu festivo: todos juntos alentando. Yo creía que me perdería eso.. pero no importaba... tendría a mi bebé para que gritemos juntos los goles. Pero no fue así.
Llegó el mundial. Mi bebé estaba en el cementerio y yo estaba en el trabajo... sola.
 
Demasiadas ilusiones rotas. Demasiadas imágenes equivocadas.
 
Mis compañeros de trabajo gritando y alentando al equipo de Argentina. Y yo, encerrada en una oficina... llorando... sin tener fuerzas para salir. Me escondía por dolor. Me encerraba por el sufrimiento de tener que afrontar una realidad muy dura: era mi primer mundial sin mi bebé.

domingo, 8 de junio de 2014

Y me preguntan cuántos hijos tengo

Creo que es la pregunta mas difícil que me toca responder. A veces ni quiero responderla. O siento que soy insensible, o que niego la existencia de mis bebés.
 
Antes del nacimiento de Sofi sentía que era blanco o negro. O decía que había tenido un bebé que murió en mí o que no tenía hijos. Si decía lo primero sentía como que era demasiada información y que tal vez estaba poniendo a esa persona en un lugar incómodo. Pero si decía que no tenía, sentía que estaba mintiendo. Y por otro lado, que estaba ocultando o negando la vida/muerte de mi bebé.
 
Y nació Sofi. "Cuántos hijos tenés?" "Es la primera?" y trataba de responder desde la verdad. A veces hasta respondía otra cosa para no entrar en mi debate interno.
- "¿Tenés mas hijos?"
- "Es mi primera nena"

Y después perdí otro embarazo. Y luego vino Ana. "Cuántos hijos tenés?" "Es la primera?" Ahora la respuesta estaba mas complicada. Normalmente respondo:
"Tengo otra en el jardín".. refiriéndome al jardín de infantes ya que normalmente me encontraban sola con Ana en la calle haciendo las compras.
Cuando respondo sólo eso, siento que se me desgarra el corazón... pero si no lo hago... la gente no entiende... es demasiada información. No es como cuando preguntamos sobre los padres de una persona de mas de 30 años y nos dicen "falleció", sentimos congoja y extendemos nuestro pésame. ¿No podría ser así de natural?
 
Recuerdo la misma pregunta pero referida a los embarazos. Y amiga.. vos bien sabrás que no es lo mismo entrar en trabajo de parto de un segundo embarazo.. ahí no importa cuantos hijos vivos tengamos. Cuando fui a ver a mi partera en el embarazo de Ana me dijo "Ojo Mari que va a ser tu tercer parto.. puede venir todo mas rápido". Pero de esto hablaremos otro día...
 
Siento que no soy como la mayoría de las madres que tienen uno, dos, tres o cuatro hijos. Sino como la minoría que tenemos un par acá y otro par allá... en el cielo.
 
 Y vos.. cuántos hijos tenés?
 
 

lunes, 2 de junio de 2014

Te ame desde que supe que estabas dentro mío


Una de las cosas buenas que me pasaron gracias a la muerte de mi bebé es que estoy conociendo gente maravillosa... que de otra manera no hubiese conocido. Suena feo decir "gracias a" pero es verdad.. sino no estaría aquí hoy, ni escribiendo lo que estoy escribiendo. Y parece que junio es muy especial para muchas de nosotras.

Por eso les comparto este homenaje... de una madre para su bebé... a su Ángel:

 
Llego junio. .... Hace nueve meses imaginaba como seria este junio. ...  corriendo junto a papá al sanatorio. Imaginaba el parto con papá dándome la mano y escuchar tu llanto al salir de dentro mío. Llamar a los abuelos y tíos para avisarles que ya estabas acá, que podían pasar a visitarte. Imaginaba tu olor a bebé, tu mirada inocente y que tu sonrisa sería lo más hermoso del mundo.
Imaginaba llegar a nuestra casa y acostarte en la cuna que tanto nos costó elegir, darte besos en tu pancita mientras cambiaba tu pañal. Imaginaba discusiones con papá para ver de quien era el turno de levantarse.
No veía la hora de que sea junio para conocerte.
 
Finalmente llego junio. Pero no es el que yo imaginaba hace nueve meses.
Con papá si salimos para el sanatorio pero hace tres meses. Papá si estuvo a mi lado en el parto pero el único llanto que se escucho fue el nuestro. Sólo pude verte por un minuto.  Necesitaba conocerte y eras tan hermoso como te imaginé.
Llegue a casa y solo tenía tu cuna, vacía porque vaya a saber por qué razón no pudiste quedarte con nosotros, los regalos de la gente que no pudo conocerte, la ropita con la que te había imaginado.
Creo q pasaste por nuestra vida para enseñarnos. Con vos aprendí a valorar las cosas por lo que realmente son. Aprendí a decirles a las personas que las quiero más seguido por que nunca se sabe por cuánto tiempo las vas a tener.  Aprendí a no organizar tanto y disfrutar más del momento porque todo lo que organizamos puede cambiar en un segundo.
Gracias a vos aprendí lo que significa ser mamá.
Aprendí que se puede amar a alguien sin conocerlo. Porque desde que supe que estabas dentro mío te ame más de lo sabía que podía amar. <3
  
Gracias Silvina Ignatti por compartirnos tu historia de amor :)

martes, 27 de mayo de 2014

Por las dudas no te quiero mucho

¿No te pasó que luego de la muerte de tu bebé comenzaste a sentir menos amor por las personas que mas querías?
¿No te pasó que luego de la muerte de tu bebé tuviste otro hijo y no sentiste morirte de amor?
 
Pues a mi sí me pasó. Como te quiero tanto, por las dudas no te quiero mucho. Por las dudas que vos también mueras. Por las dudas que se vuelva a romper mi corazón y ya no pueda seguir adelante. Por las dudas que me dejes solita acá extrañándote. Por las dudas.
 
 
La mente es rara. La mía piensa que si no quiero tanto a mis bebés que nacieron vivas y sanas, si se llegan a morir no dolerá tanto. Entonces por las dudas no las quiero mucho. Las quiero... pero no mucho... por las dudas.
 
Por las dudas doy por sentado que quiero a mi marido. Pero por las dudas no lo quiero mucho... por si me deja sola, triste y abandonada.
 
El amor de hermanas es obvio.. pero por las dudas hago que no me importa mucho. Por las dudas que me haga llorar mucho.
 
Si me imagino un escenario sin mis seres queridos solo veo dolor, sufrimiento, angustia, pena, soledad, lágrimas. Entonces si los quiero menos y mañana no están el dolor, sufrimiento, angustia, pena, soledad, lágrimas serán menos (recuerden que eso es lo que mi mente dice que cree).
 
Cuando faltaba un mes para el segundo cumpleaños de Sofi, se tiró un clavado de la cuna y se quebró el cráneo. Fueron 4 días de internación y estudios. Mientras escuchábamos a los médicos que decían al verla "Ahhh.. pero camina". Tuve mucho miedo, porque sabía que cualquier cosa podría pasarnos. Desde que perdiera un ojo, quede con algún retraso.. o hasta se muera. Me imagina que sus fotos de ahi en adelante estarían con un ojito solo... y las de antes con los dos. Cualquier cosa podría pasarnos porque ya habíamos experimentado que esas cosas que le pasan a los demás nos pasaron también a nosotros.
 
Recién cuando Sofi tuvo dos años y monedas, durante el embarazo de Ana, sentí que me estaba conectando con ella. Siempre supe que la amaba... pero sentía que mi amor por ella era mas grande de lo que realmente estaba sintiendo... por las dudas. Ahí comencé a dejar salir de mi corazón el amor que sentía por Sofi. Ahí comencé a sacarme la armadura. Tal vez porque de esa manera no me conectaba con Ana por las dudas que le pase algo durante el embarazo. Pero al final me conecté con Sofi y cuando vi a Ana con su cordón aún intacto y sentada en medio de mi pancita abierta dije en voz alta: Es hermosa.
 
Al final me permití sentir.
 
Por las dudas hoy las quiero mucho. Por las dudas que yo no esté mañana.
 

miércoles, 21 de mayo de 2014

Se acerca otra fecha

Hay muchas fechas que nos quedan marcadas en el corazón. Pero esta fecha pasó tan rápido que a penas dejó su marca. No puedo recordar la FPP de mi tercer embarazo. ¿Será bloqueo? ¿Será protección? Yo siento que pasó todo muy rápido. TODO... hasta el duelo. No es que olvide ese embarazo... pero ni siquiera tengo una ecografía de recuerdo porque la que tengo dice que ya no queda casi nada. Entonces busco en mi calendario.. la FUM fue 21 de septiembre.... claro por eso pienso en junio.
 
 
 
¿Qué recuerdo? Recuerdo que era noviembre y faltaban unos días para mi cumpleaños. Era la semana 7+6d. Tal vez el nunca haber podido llegar a escuchar su corazón hizo que doliera menos. Tal vez mi escudo protector del dolor impidió que me aferrara a ese bebé.
¿Qué recuerdo? que la FPP estaba cercana al cumpleaños de mi sobrino. En algún momento llegué a pensar "¿y se juntan? ¡será un lío de cumples!"
¿Qué recuerdo? que la vecina estaba de 8 semanas. Y ahí está mi FPP. Todavía me molesta verla pero ya no porque veo a su hija y pienso que mi bebé no creció. Cuando la cruzo me siento incómoda. La recuerdo con una sonrisa en al cara y su panza creciendo. Y yo con una lágrima en mi mejilla y vacía. Hasta me molesta recordar que cuando le comenté que si estaba rara cuando la cruzaba era porque yo había estado embarazada al mismo tiempo que ella... pero ya no, su respuesta fue "Bueno, ya vas a tener otro. Yo tengo una amiga que también tiene problemas para quedar embarazada" (yo tuve un aborto, embarazada quedé bastante rápido!!). Y después de eso me borró del Facebook que ella me había agregado. Incomoda, así me hizo sentir. ¿Habrá pensado que la odiaba? ¿Habrá pensado que la envidiaba? Yo creo que simplemente no entendió lo que le dije...
Todavía me incomoda verla. Pero cuando veo a su hija no veo a mi bebé. Tal vez porque fue todo tan rápido. Tal vez porque tan rápido vino Ana a iluminar mi vida con amor. Cuando su beba nació yo ya estaba embarazada de Ana de 2 meses. Y toda mi atención estaba en Ana ya que tenía la placenta baja y estaba con reposo por pérdidas.
 
Pero estos días pienso en mi bebé que se fue demasiado pronto porque llega el cumple de mi sobrino y su beba va a cumplir un año. Y hace unos días se murió la plantita donde puse a mi bebé.
 
Incomoda porque su beba está en la misma sala maternal que Ana. Pero Ana sana mi corazón. Yo pienso que si ese bebé hubiese nacido y vivido Ana no estaría acá. Y ella es mi salvadora, mi segunda salvadora. Si ese bebé hubiese nacido y vivido, y luego buscaba otro.. no sería Ana, sería otro pero no Ana. Y ella es luz pura. Ella es... simplemente ella. Ella capta todas mis miradas cuando pasa la vecina.
 
Ana Lucía con mucha fuerza y personalidad... una luchadora. Ella hace que todo vuelva a tener sentido.

jueves, 15 de mayo de 2014

La Historia de Gerardo

Seguramente Gerardo tiene muchas historias. Seguramente Gerardo no era lo que yo conocí. Pero para mí su paso por mi vida tiene un significado. Y así quiero recordarlo.
 
Al poco tiempo de empezar el noviazgo con mi marido comencé a escuchar sobre Gerardo. Estaba casado y compartían reuniones y tragos con mi marido y mi cuñado. Eran como tres hermanos. Y claro.. al ser como hermanos fui conociéndolo mas... pero a través de mi marido.. como sin quererlo.
 
Gerardo era abogado penalista. Tenía unos treinta y pico. Y tenía una hermosa sonrisa. Yo creía que era feliz. Con el correr de los años se separó - pero esa es otra historia. Yo les quiero contar sobre la tristeza que tenía en su corazón... cuando era chico falleció su hermana mas pequeña. Imaginen su sufrimiento. Pero eso no fue todo. Sus padres no podían sobrellevar la muerte de su hija y les costaba mucho seguir adelante. Su papá era psiquiatra pero ni con todo su conocimiento pudo sanar su corazón. No pudo aprender a vivir con un ángel en el cielo y decidió ir con ella pegándose un tiro. ¡Pobre Gerardo!.. no tenía a su hermana y ahora tampoco a su papá. Y su mamá solo se centró en su propio dolor.. negándolo y distanciándose un poco de la realidad.
Alguna vez Gerardo contó sin querer que sus padres decían que lo único que importaba era su hija y que ella estaba muerta... (y él???????).
Ojala se hubiesen dado cuenta que tenían un hijo vivo, que él los necesitaba y que podían pasar el duelo juntos y apoyarse con mucho amor.
 
Gerardo estuvo toda la noche y madrugada en la sala de espera de partos con mi cuñado, esperando que naciera mi bebé sin vida. A los 15 días llamó mi cuñado llorando.. Gerardo estaba muerto, se había matado. Primero me puse mal, después sentí alivio por él (como dicen... ya no sufriría mas). Luego le pedí que cuide a mi bebé cuando lo viera...
 
Sintamos nuestras pérdidas y recordémoslos con amor.. pero por favor... acordémonos de Gerardo:  amemos y vivamos para, y con, nuestros otros hijos, parejas, padres, familiares y amigos.
 
Y así hoy resignifico su vida y muerte. Gracias Gerardo :)

martes, 13 de mayo de 2014

Mis Frases Favoritas

Iré subiendo más a medida que descubra nuevas frases y pueda hacer con ellas una linda imagen.


















 

domingo, 11 de mayo de 2014

Hoy recomiendo: March of Dimes (Nacersano)

HOY RECOMIENDO: March of Dimes (Nacersano en su versión en español) porque su misión es "mejorar la salud de los bebés al prevenir los defectos de nacimiento, el nacimiento prematuro y la mortalidad infantil". Y es una de las pocas páginas ...que tienen información sobre pérdidas. Acá les paso el link
 
 

También ofrecen material para lidiar con el duelo. Yo lo pedí y me llegó por correo a mi casa (gratis y desde EE.UU), pero sobre todo el material es simple, breve... es excelente.
Cuando murió mi bebé fue una de las mejores páginas que encontré ya que hablaba sobre los motivos de las muertes fetales - recuerden que fue hace 4 años... ni siquiera tenían la página en su versión español separada ni el material sobre duelo.
Hay un montón de herramientas y personas que nos pueden ayudar.. solo depende de nosotros. Solo depende de nosotros pedir ayuda. Ayuda para seguir adelante y aprender a vivir con angelitos en el cielo.
 
 

miércoles, 7 de mayo de 2014

Las cosas que nadie te dice

El otro día me contaba mi marido sobre la muerte de un bebé de una ex-compañera del trabajo. A los dos se nos hizo un nudo en la garganta. Esa muerte nos reconectó con nuestro dolor...
Y en un momento me dijo... "nadie te dice las cosas que después tenés vivir".


Image courtesy of David Castillo Dominici / FreeDigitalPhotos.net

Nadie te dice que podés disponer de su cuerpito y que debés hacerlo si pesa mas de 500gr.
No. Nadie te dice que después del parto te preguntan si querés bautizarlo.
Nadie te dice que después tenés que decidir qué cajoncito elegir. Y que te dicen que es tan pequeño que no vale la pena. Para mi si valía la pena.. era mi hijo. Entonces quise cremarlo y me dijeron que no iba a quedar nada. Igual así lo hicimos.. al menos sería algo simbólico. Nadie te dice tampoco que si queres un cajoncito te dan uno blanco... porque es un "angelito" - no hay otro color. O que como es "tan chiquito" no te dan un auto para llevar el cajón.. lo tenés que llevar con vos. Recuerdo el suyo entre mi marido y yo... y pensaba que dentro estaba su cuerpito, sus bracitos, piernitas...
Nadie te dice que si nació con vida y luego murió tenés que gestionar el certificado de nacimiento y el D.N.I.... además del certificado de defunción. Antes tal vez te lo podía gestionar la clínica... al menos algunas..
Nadie te dice que podés elegir verlo y/o abrazarlo... o no. Yo elegí que no, y no me arrepiento.. su imagen quedó intacta... como un bebito en mi pancita.
Nadie te dice que podés recibir a tu familia para que lo conozca. Y tomarle fotografías. Si eso es lo que querés.
La ley sólo da dos días por fallecimiento de familiar directo (inclusive un hijo).... nadie lo dice. Y la verdad que es muy poco. Lleva mucho mas tiempo la recuperación física, y ni que hablar de la mental. Menos mal que en algunas empresas los jefes son mas humanos y con los médicos te pueden dar un par de días mas.
Tampoco te dicen que en Argentina si supera los 180 días de gestación te pagan los 3 meses de la asignación familiar por maternidad. Ansés me decía que no me correspondía porque había muerto... y esta información estaba en su página de internet!
 
Nadie te dice que si delegás estas decisiones puede ser que luego te arrepientas.

Lo que pasa es que es como "dicen por ahí": vivir la muerte de un hijo es antinatural. La sociedad, la vida está preparara y armada para los estereotipos perfectos.

Estereotipos.. porque nuestros hijos serán siempre perfectos.

Y a vos.. ¿qué cosa no te dijeron?
 

jueves, 17 de abril de 2014

Resignificando la muerte de mi bebé

Hasta ahora fue difícil explicar qué significaba para mí la palabra "resignificar", aunque tenía muy en claro que era.
 
Nunca quise que la muerte de mi bebé fuera solamente un paso por mi vida; una historia corta; una muerte mas; o simplemente que se olvidara. Mi marido dice que las cosas simplemente pasan pero a mi me gusta pensar que pasan por algo.
 
Entonces tuve que encontrar el significado de ese bebé que pasó por mi vida. Para mí, había pasado por algo. ¿Cuál fue su sentido de vida y muerte? Me traía un mensaje... pero ¿cuál era?. Me traía una enseñanza... pero ¿cuál?. Pero tal vez no solamente era para mí.  Tal vez su existencia y muerte tenía que ver con otras personas también.. pero ¿quienes?
 
Ese 2010 me crucé con el video de Steve Jobs - "Connecting the dots" (Conectando los puntos) - si no lo conocen, les sugiero verlo.
 
 
Entonces... ¿y si la muerte de mi bebé era un punto para conectar? Sería hermoso.
 
Desde allí comencé a ver cuales eran los otros puntos que tenía que conectar. Pero la vida continuaba muy rápido y yo iba haciendo mas y mas cosas; sin quererlo, sin saberlo. Aunque muchas veces hice cosas por el solo hecho que me gustaran ya que luego sabría mas adelante porqué sería - como cuando Steve Jobs realizó el curso de caligrafía.
 
Estos son los puntos, que mirando atrás hoy conecto: muerte de mi primer bebé + duelo + sufrimiento + soledad + coaching ontológico + nuevos amigos + embarazo + ansiedad + hija + psicoterapia positiva + búsqueda personal y laboral + embarazo y aborto espontáneo + sufrimiento + embarazo con reposo + muchos miedos + aceptación + misión + muerte fetal tabú + padres que han perdido un bebé + empatía + hija  = Vivir con Angelitos en el Cielo.
 
Mi primer bebé pasó por mi vida para traerme acá, para ser la que soy, sumando los acontecimientos posteriores a su muerte - que de no haber sucedido no los hubiese hecho y seguramente no los hubiese conectado dándole este significado.
 
Me encantaría poder mantener este blog en el tiempo. Me encantaría poder realizar las reuniones de apoyo. Me encantaría poder ayudar a otros padres. Me encantaría.
 
A veces, cuando el blog, la página de Facebook o los e-mails, están muy callados dudo si soy capaz de ayudar o si puedo hacerlo de otra forma.
 
... y así es como hoy resignifico su vida y muerte...
 

lunes, 14 de abril de 2014

Hoy Recomiendo: Alas para ti

Al haber lanzado la página de Facebook cada día voy encontrando mas material que me gustaría compartir... que me hubiese gustado que me compartan al principio de mi duelo.
 
Así que a medida que el tiempo me lo permita, les compartiré algunas joyitas para reflexionar, preguntarnos, sentir, comentar y compartir.

Hoy quisiera recomendarles este video "Alas para Ti" es un Cortometraje promocional para SUA.
 
Es tan real... me lleva al pasado... me trae de vuelta... me vuelve a llevar y me hace llorar...
 



Sus comentarios son caricias para mi alma. Gracias por leerme ;)



jueves, 10 de abril de 2014

A cada uno le duele lo suyo

Ayer pensaba en esta frase "a cada uno le duele lo suyo". Pensaba que a mi me duele la muerte de mi bebé y la pérdida de mi tercer embarazo pero a vos te duele la pérdida del tuyo y al vecino le duele la muerte de su madre, a una maestra le duele la muerte de su pareja. Y no está mal. Leía por internet que en los grupos de ayuda de duelo cada persona es "egoísta" en su dolor y al finalizar los encuentros entienden que cada dolor es diferente, ni mas ni menos fuerte que el nuestro. Comienzan a ver mas allá de su sufrimiento y a sentir empatía por el sufrimiento del otro.

Muchas veces leo en los foros a mamis que perdieron un bebé recién nacido decirle a otra mami que perdió uno de 8 semanas de gestación "no es lo mismo" o "el dolor no es el mismo, no te podés dar una idea". Evidentemente esas mamis aún están en las primeras etapas de su duelo y no pueden sentir empatía por el sufrimiento de otra madre. A todas se nos desgarra el corazón y el alma. A todas nos parece irreal lo que vivimos. Y es lo que peor que nos pasó a todas... sin importar el tiempo que hayamos llevado esos bebés en nuestras pancitas.

Entonces me pregunto.. ¿cuántas veces no podemos entender el sufrimiento de los demás? Parecería que solo podemos hacerlo cuando vivimos algo similar porque antes es como imposible. Nunca imaginamos que puede pasarnos algo así y no tenemos idea cómo nos sentiríamos. Podemos respetar los sentimientos del otro y acompañarlos pero creo que cuesta realmente entender porque mas que algo lógico es algo que se siente. Se siente en el corazón, en el alma y en el cuerpo. Por eso mucha gente habla de dolor... como si fuera algo físico...

Nutdanai Apikhomboonwaroot
 
 
 

viernes, 4 de abril de 2014

¿A dónde van nuestros hijos?

 
 
El otro día leí el libro "¿A dónde van nuestros hijos cuando se nos van tan pronto", de Mónica Alvarez y Rebeca López Noval.
 
Nunca me lo había preguntado. Tal vez porque aún estoy enojada con Dios que se llevó mi bebé y me cuesta creer que hay algo después de la muerte. Creo que no lo había pensado porque si lo pienso no hay nada después. Si lo pienso, mi bebé murió y terminó su vida, su existencia. Ni alma ni nada, se murió.
 
Pero por otro lado cuando llevamos sus cenizas al cementerio me sentí en paz dejándolo junto a mi abuelo y a un primito segundo con quién podría jugar. Me gustaba esa idea (aún me gusta). Sin pensarlo mucho, puedo imaginarme a mi bebé como un angelito... y obviamente en el cielo. Tal vez jugando, tal vez cuidando de alguien... como un ángel guardián.
Entonces ahora que lo pienso un poco mejor.. prefiero pensar en mi bebé como un ángel, que se murió para transformarse en un angelito con un destino fijado... uno hermoso dónde es muy feliz... uno sin sufrimiento...
 
Les recomiendo el libro. Yo lo leí en formato kindle. Acá les dejo un link dónde pueden leer un fragmento.
 
 
Y sus hijos.. ¿a dónde creen que fueron?
 
 

lunes, 31 de marzo de 2014

Mi página en Facebook

Todo es un aprendizaje para mí: qué temas comento, cómo configuro la página, como respondo comentarios, qué imágenes y fotos pongo, cómo agrego un link... pero mi mayor desafío es cómo ayudo a otros papis desde mi experiencia.
 
Entonces se me ocurrió armar una página en Facebook.
 
Quiero invitar a todas las personas interesadas en mi blog que tengan una cuenta en Facebook a que ingresen a  https://www.facebook.com/VivirConAngelitosEnElCielo y poner me gusta. Así podremos estar en contacto. Me gustaría escucharlas y saber cómo están y qué piensan.
 
Espero que me apoyen en este nuevo proyecto :)
 
Les mando un fuerte abrazo de corazón a corazón.

Parte de mi Historia, de nuestra Historia, de nuestra Familia

Nunca me sentí una típica chica, ni típica mujer.. menos típica madre. Este sentimiento se acrecentó luego la muerte de mi primer bebé. ¿Cuántas mujeres habían pasado por esto? Hoy sé que muchas, pero claro que no la típica mujer. La típica mujer es el estereotipo (ese que solo existe en el imaginario general). Esa mujer que se casó con el hombre perfecto, con el vestido perfecto, la fiesta perfecta, la casa perfecta, el auto perfecto, las vacaciones perfectas, el embarazo perfecto y dos hijos perfectos (un varón y una mujer, obvio!). Entonces cuelgan en su cuello dos dijes en una cadenita: una nena y un nene. Y la vida es perfecta (o al menos muchas eso quieren demostrar). ¿Y quién no quiere tener eso? hasta yo lo quiero.. pero lo no voy a andar diciendolo porque mi vida está lejos de ser perfecta (perfecta para qué? perfecta para quién?).

Yo quería poder colgarme ese dije. Pero tuve un angelito. Creo que en el fondo lo que quería era un hijo... vivo. Así que termimé comprando un dije de un angelito y me lo puse en una pulsera en mi brazo izquierdo (el que va al corazón) - sin saber que era un ritual sanador del duelo también.
Luego nació Sofi. Compré un dije de una nena (con un corazón de oro.. en realidad no busqué exactamente esa). ¡Si tenía una para mi angelito tenía que tener una para Sofi! Después nació Ana y fui corriendo a comprar otro dije de una nena (esta tiene dos colitas como si tuviera los pelos parados!) y también la puse en una pulsera del mismo lado que Sofi.. juntas ellas.

Image courtesy of ungphoto's/FreeDigitalPhotos.net

 
Sofi ya tiene dos años y medio. Vió los dijes. Le expliqué que la nena de corazón de oro era ella, la de los pelos parados era Ana (ambas igual a la realidad!). Y luego le mostré el angelito.. y dijo "qué lindo! un angeliiiitooo". ¿Cómo no mostrárselo si es parte de mi historia? Si, es parte de su historia también, la historia de nuestra familia. Me gusta que sea todo con naturalidad. Si nombramos a abuelos, padres o hasta tíos fallecidos.. ¿cómo no le voy a contar sobre su hermano?! Pero todo a su debido tiempo.
 
Me encanta que mi vida sea perfectamente imperfecta ya que es original y única como yo :)